Recibí el otro día un email. Se trataba de una vieja amiga en el cual, lo primero que dejó claro es que no se llevaba bien con las nuevas tecnologías ni con nada de eso de las redes sociales o el propio mundillo de los blogs. Y casi se mostraba molesta por todo lo que comenté de que podía dejar un mensaje en este blog, o a través de cierta red social a la cual estoy suscrito. Casi resultaba oferndida "tengo demasiadas cosas en las que pensar como para ponerte a eso" se desprendia de su mensaje. Es curioso que la divulgación de la informatica no...