C O R D U R A

Cordura:Estado psíquico de la persona que tiene la mente sana y no padece ningún trastorno o enfermedad mental.

I N S T A N T E

Instante: Período de tiempo muy breve, casi imperceptible.

UN BREVE INSTANTE DE CORDURA

Un paseo de la mano de la introspección y la reflexión sobre la locura de la vida moderna.

oTrOs lO dIcEN

Do you still believe in fairy tales, in battlements of shining castles, Safe from the dragons that lie beneath the hill?

La Bitácora personal...

De un soñador de Bits en Pijama

jueves, 27 de agosto de 2009

El Poder del Mar

Vio su foto. No la reconocía apenas. Había engordado, un extraño tatuaje poblaba su brazo izquierdo. La vida es un muestrario de momentos extraños. La vió a través de la pantalla, a través de una foto enviada por un amigo. La pantalla brillaba blanca y el gestor de correo electrónico transmitia la pregunta que enviaba Pedro Aldama: ¿Es ella? Y se dijo "Si". Pero luego pensó. "No , no es ella. Somos diferentes en cada momento. No somos los mismos que un día compartieron parte de su vida. Somos otros, con otro horario, con otras costumbres, con otros amigos. El tiempo no espera."

PEdro respondió al otro lado. "La encontré por pura casualidad en mi último viaje. Y le saqué esta foto." "Ahora vive en Formentera, y trabaja en un chiringuito de playa"

Reflejado en el cristal del monitor, se vió a si mismo. Se había dejado el pelo más largo, entrecanoso, su barba era inexistente ahora. Lejanos quedaron los isntante de la vida de bohemio, cuando no era un esclavo de su trabajo y su tiempo libre inexistente. Habían pasado nueve años. Del tiempo que les contuvo nada quedaba, ni siquiera un suave recuerdo estético.

Soy mayor ahora, se dijo. Soy mayor y responsable. Ella vive su vida todavía entre juergas de surf, entre la irresponsabilidad de los que quieren vivir sin ataduras, libre como el viento. Yo me contengo a mi mismo aquí, sereno y calmado, aburguesado en mi loft, con mis instrumentos materiales de placer: televisión por cable, internet de alta velocidad, mi pequeño coche.

Afuera vió el mar dibujado en una mañana de sábado. Los coches todavía dibujaban haces de luces en la autopista. LA primavera había abandonado la ciudad. Se sintió libre, nuevo y más joven. Ese mismo mar bañaba la arena de la playa donde se bañaba su antiguo amor.

miércoles, 12 de agosto de 2009

Los Hijos de Hiroshima


Quiero hacer una pequeña reseña haciendome eco del triste aniversario del lanzamiento de la bomba Atómica en Hiroshima. Y aunque no soy demasiado proclive a poner links externos a otras páginas, esta vez voy a hacer una excepción. Porque merece la pena.Se trata de unas impresionantes imágenes de la zona cero días después del ataque. Las fotografías pertenecen al departamento de defensa de los estados unidos.

Por otro lado, no podemos dejar de lado algunos números aterradores sobre la explosión de Hiroshima, ni podemos dejar de reflexionar sobre ellos.

  • Murieron en el acto 70.000 personas, es decir 29 VECES MÁS que en el ataque al Word Trade Center.
  • Otros 70000 murieron hasta 1950 debido a radiacion y quemaduras. La bomba siguio matando durante diez años más después de su lanzamiento. Es decir, murieron sesenta veces más personas que en ataque de NYC.
  • EEUU es la única nación del planeta que ha usado un dispositivo nuclear en una contienda.
  • Se estima que hacia finales de 1945, las bombas habían matado a 140.000 personas en Hiroshima y 80.000 en Nagasaki aunque sólo la mitad había fallecido los días de los bombardeos. Entre las víctimas, del 15 al 20% murieron por lesiones o enfermedades atribuidas a radiación. Desde entonces, algunas otras personas han fallecido de leucemia (231 casos observados) y distintos canceres (334 observados) atribuidos a la exposición a la radiación liberada por las bombas. En ambas ciudades, la gran mayoría de las muertes fueron de civiles.
  • Murió el 35% de la población en menos de un segundo.



Sólo un mundo que vete el uso de las armas nucleares, sólo un mundo que niegue su uso, que lo prohiba; sólo un planeta en el que la gente vete abiertamente el uso de la fisión nuclear podrá ser un mundo viable y con posiblidades de pervivencia.

Como final, os dejo las transcripciones de las comunicaciones realizadas tanto por el artillero de cola del Enola Gay, como del copiloto. No pueden ser más aterradoras.
  • Mientras el Enola Gay se alejaba a toda velocidad de la ciudad, el Capitán Robert Lewis, copiloto del bombardero, comentó: «Dios mío ¿Qué hemos hecho?»Bob Caron, artillero de cola del Enola Gay describió así la escena:
    «Una columna de humo asciende rápidamente. Su centro muestra un terrible color rojo. Todo es pura turbulencia. Es una masa burbujeante gris violácea, con un núcleo rojo. Todo es pura turbulencia. Los incendios se extienden por todas partes como llamas que surgiesen de un enorme lecho de brasas. Comienzo a contar los incendios. Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis... catorce, quince... es imposible. Son demasiados para poder contarlos. Aquí llega la forma de hongo de la que nos habló el capitán Parsons. Viene hacia aquí. Es como una masa de melaza burbujeante. El hongo se extiende. Puede que tenga mil quinientos o quizá tres mil metros de anchura y unos ochocientos de altura. Crece más y más. Está casi a nuestro nivel y sigue ascendiendo. Es muy negro, pero muestra cierto tinte violáceo muy extraño. La base del hongo se parece a una densa niebla atravesada con un lanzallamas La ciudad debe estar abajo de todo eso. Las llamas y el humo se están hinchando y se arremolinan alrededor de las estribaciones. Las colinas están desapareciendo bajo el humo. Todo cuanto veo ahora de la ciudad es el muelle principal y lo que parece ser un campo de aviación».
  • Bob Caron, artillero de cola/fotógrafo del Enola Gay


Aquí está el prometido LINK


martes, 11 de agosto de 2009

Pactos renovados.


Salí de noche del hospital. Las noticias eran buenas. Ultima noche de quien más quiero en el recinto. En dos días volveremos a estar todos juntos. El alma, el espíritu, estaba más relajado. Una cálida luz interior inundaba serenamente el momento. Salí por el garaje. Estaba cansado. Días durmiendo pocas horas, algo de estrés, intranquilidad, decepción en lo personal con algunas personas de mi entorno cercano por su dejadez y laxitud... todo aquello quedará atrás. Me dije a mi mismo que la vida merecía la pena. Quedan pendientes cosas por hacer, cosas que quedaron en el tintero porque la salud es lo principal en algunos momentos. Este pequeño bachecito quedará atrás. Retomaremos lo que ibamos a hacer.

Me recibió la noche, noche de verano. Las estrellas estaban allí, despúes de tánto tiempo sin verlas. Tomé aire. Olor fresco a hierba y a vida. Me sentí bien.

Recordé lo pactado con la propia vida. Vivirla sin demora, sin medida, beber de ella, emborracharme de ella, seguir disfrutando de vivir como el néctar, la ambrosía esencial de la exitencia. Renové ese pacto. El cielo de Santiago es un espejo donde la vida se refleja serena y diáfana. Que lejos y qué cerca hemos tenido las estrellas. Pacto renovado. Y aunque algo herido, algo decepcionado, sigo sereno, fuerte... y en pie. El amor vuelve a casa. Esa es la mejor noticia.

sábado, 8 de agosto de 2009

La indecente Chapuza

El otro día tuve la suerte de asistir al concerto de Bruce Springsteen en Monte do Gozo. El concierto fue tan inolvidable como inolvidable fue la chapuza soberbia de organización, un auténtido recital de despropósitos, un auténtico riesgo para una muchedumbre, un sinfin de incapacidad para organizar nada. Un día pasará algo. Y pasará algo grave.

Comentaba Miguel Ferreiro en su blog el tema con los suficientes detalles. Yo pienso dar una perspectiva personal de todo esto. Imagínense a qué extremos llegó la incapacidad y la imprevisión de los responsables del evento que este que les escribe llegó dentro del recinto -y por lo visto en las noticias relacionadas, bastante suerte tuve ya- con una mochila del tamaño de un libro grande sin ser examinada por ninguno de los responsables de la seguridad. Pues nada, oye, que yo no la he visto mejor pintanda para hacer un atentado o liar una gorda. Bruce Springsteen -icono norteamericano- en concierto en Santiago -icono católico- y los de Al-Qaeda, menos mal que en agosto suponemos que estuvieron de vacaciones. Como para liarla parda.

El drama pudo montarse por diferentes vías, tanto la de la falta de control de acceso, como la falta de criterio de seguridad, la falta de vias de entrada y salida señalizadas, unos accesos indecentes impropios de un evento de semejante calibre, un falta de inversión en la instalación que puede rayar el abandono (cuando llegabas a la puerta de acceso, te encontrabas con la falda desnuda del monte, sin una sola vía que te llevase a la puerta, sin un camino, aborregado con otras miles de almas en medio de la hierba verde, chapoteando de vez en cuando en un lodazal) una improvisación espeluznante, una falta de criterio a la hora de tomar decisiones que puede rayar lo delictivo... en fin... que cuando lo pienso se me ponen los pelos de punta.

Algún día pasará algo. Insisto. No podemos permitir que una ciudad turística como Santiago, una ciudad que es referente europeo como destino, una ciudad que intenta ser un referente cultural a nivel mundial -gracias a otra indecente chapuza llamada ciudad de la cultura- se pueda permitir el lujo de no exigir una calidad con respecto al trato al público -que a fin de cuentas es el cliente en todo este embrollo, y es el que paga. Si no hay capacidad, ni instalaciones, ni espacio, ni medios, es preferible no hacerlo antes que hacerlo de esta manera. Porque la imagen ofrecida el otro día solo puede tacharse de esperpética. Una imagen impropia de una ciudad que vive de sus visitantes en un grado muy elevado. Si se quiere tener instalaciones, hay que cuidarlas, invertir en ellas, prepararlas y mantenerlas. Y si no, que no las hagan solo por intereses políticos.

Hablan de incapacidad de las instalaciones. Hablan de falta de presupuesto y de carencia de medios en la producción y en el local destinado a acoger el evento. "El resto del año está abandonado" decia el otro día un responsable de Doctor Music. "Tuvimos que rehabilitarlo en un tiempo insuficiente" Y yo me pregunto: si un auditorio como el de Monte do Gozo, referente en el xacobeo 93 tiene ese grado de abandono total y falta de actualización... ¿qué nos esperará con ese monstruoso megalomano proyecto llamado "ciudad de la cultura" dentro de diez años? Probablemente otras ruinas modernas donde habremos tirado, con la brabuconeria y prepotencia de nuestros políticos, cientos de millones que podrían estar mejor invertidos en otras miles y miles de cosas. Somos un pais de pobres con comportamiento de niños ricos. Y así nos va.

viernes, 7 de agosto de 2009

Dulce Amnesia

Salgo del Hospital. Camino solo. La noche ha caido hace un rato y el alma va a trizas, calle abajo, hasta el coche. Mi pequeño corazón espera. Ya bañada, ya alimentada, gracias a Teté. Esa parte de mi que sale del hospital es una parte incompleta: ausencia de ellas.

Extraigo del derredor todo lo posible. Unos segundos de paz. El sol dejó su rastro en el cielo y sólo las nubes nos impiden ver sus resquicios. A lo lejos la Barcia aparece hermosa, rural, verde y alegre. Nosotros, sin embargo no somos los mismos. Desmemoré lo muchísimo que amaba esta ciudad por sus paisajes y sus rincones. Sus alrededores me calman. Su hermosura me seda y me tranquiliza. Su belleza me nutre, la interiorizo y de cierto modo me salva.

A los veintitrés años no pude evitar enamorarme de Santiago. Me encantaba la ciudad. Cuando llegaba a sus calles, notaba algo en el pecho. Una sensación de tranquilidad, de brillo, de excitación. Ahora esas sensaciones se han mitigado. Pero cuando he salido por la puerta trasera del hospital dejando a quien más quiero atras, con sus goteros, sus dolores, su oxígeno... esa sensación de que estoy disfrutando un gran regalo me ha vuelto a inundar. Y volví a sentir ese brillo interior mirando A Barcia y el sol poniéndose hacia Noia. Unos segundos de paz, lo dije antes. Esos que de vez en cuando te hacen pensar que la vida cómoda que disfrutamos no es sino una anestesia extraña del resto de los días. Una amnesia dulce de sensaciones amargas. A fin de cuentas soy sólo un chico que un día cambió de ciudad. Se fue a otra ciudad que también amaba, por su calor, por sus sensaciones, por su brillo. Y es que percatarte de que lo que amas puedes perderlo en un momento no deja de darte perspectiva de todo lo que disfrutas. Regalos que nunca abrimos y siempre disfrutamos.

La soledad me inunda. Las hecho de menos. Apenas veo a mis dos trocitos de corazón. A veces no dejo de pensar que esta dulce amnesia y esta anestesia, puntualmente desaparecen. Entonces vuelve a surgir el mismo que he sido siempre. Triste, melancólico y ajado. Pero a fin de cuentas, soy yo. Y sigo aquí.